LAS ESPERADAS VACACIONES.

Por fin se acercan mis vacaciones. Este viernes 2, me tomo dos semanas de descanso luego de un año de arduo trabajo y situaciones complejas que me tocó enfrentar en mi vida más allá de la psicóloga. El sábado temprano tomo un avión a Puerto Montt y luego no se bien si por tierra o cielo... si, por cielo, eso se los cuento a la vuelta, sigo camino a un lugar que no se exactamente dónde queda , ni cómo es, pero si tengo claro que animarme a realizar este viaje y llegar hasta allá significa para mi mucho más que sólo vacaciones. Es darme una oportunidad para alejarme un poco de cosas y situaciones que fueron duras de enfrentar y decidir, es permitirme relajarme de verdad en muchos sentidos, es tomar distancia de mi necesidad de tener las cosas claras y ordenadas antes de hacer algo y regalarme la opotunidad de sólo dejarme llevar por aquello que la vida me va poniendo en frente y disfrutar.

Mis niños en el hospital podrán descansar un par de semanas de mi, porque digámoslo, son escasos los que llegan a terapia convencidos de que quieren estar ahí...aunque con el tiempo y un vínculo adecuado la mayoría permanece por voluntad propia... parece que soy yo quién más los va a extrañar.

Bueno, trataré de escribir desde allá para contarles sobre este lugar tan desconocido para mi, porque creánme que lo único que se es que queda al diablo dentro de nuestro largo país, para contarles cómo es y cómo me va.

Besos a todos.

Leonor

PD: La foto es un pequeño adelanto del lugar al cual voy.

Decisiones

No se por qué pero por estos días ha sido frecuente cierto tema con mis compañeros de trabajo. Habemos varios que ya estamos en los 30 y te preguntas en qué posición te encuentras en este punto de tu vida. Personalmente este año además de trabajar me preocupé de estudiar, hice un diplomado en clínica infanto juvenil, un curso de 40 horas en la Chile sobre terapia familiar con gente de la Escuela de Milán, jornadas varias, etc y estoy postulando a una beca de la cual más adelante les contaré. Entonces te preguntas qué quieres hacer con tu vida en esta edad, porque si bien mi trabajo y mis estudios son algo muy importante para mi, no lo son todo, son una parte de mi vida, importante, pero sólo una parte. Algunas de mis amigas y compañeras de trabajo al igual que yo le han dado harto énfasis al tema estudios, ( postgrados) y actualmente solteras, entonces te comienzas a cuestionar algunas cosas, como por ejemplo, el tema de pareja y los hijos. No es que uno busque a alguien para ser madre, porque al menos concordamos en que no es nuestra idea. Pero si encontrar ya la estabilidad en una pareja, que te entregue satisfacciones, que llene esa otra parte de tu vida que por ahora se encuentra incompleta. A esta edad ya haz tenido algunas relaciones fallidas, decepciones, buenas parejas también, pero no resultó no más o no llegaste a enamorarte, etc. Ahora como que ya quieres otra cosa, algo que te llene más, te fijas más en las personas que conoces, algo así como más selectiva. Además para qué estamos con cosas, los buenos especímenes como que no abundan.

A los 30, ya tienes claridad de lo complejo que es el tema de pareja y te cuestionas además un tema que nos acompaña a las mujeres y que es la maternidad, ¿vas a tener hijos? ¿vas a formar familia? Mis amigos casados ( que son la mayoría) me han dicho que en mi posición de no tener compromisos como hijos y marido, me permite estudiar tranquila, irme a estudiar fuera del país, salir cuándo y dónde quieras, etc y si hago todo eso, no puedo decir que la paso mal o que me aburro, porque sería mentira, pero también te cuestionas la otra parte; la de la estabilidad en pareja y la posibilidad de ser madre en algún momento. Si bien reconozco que no es un tema que me atormente, si me he dado cuenta que si llegas a los 30 soltera, por mucho que seas profesional, con trabajo estable, estudios y cosas varias por el estilo, hay otra parte que te falta y que no sabes si la vas a concretar.

Es todo un tema esto de llegar a los 30.

Besos a todos

Leonor

El dolor en los niños

Hoy acompañé a una de mis compañeras en sus labores de enlace, programa que trabaja con niños que son hospitalizados y que requieren apoyo de salud mental, ya sea porque hicieron intentos de suicidio, porque estuvieron involucrados en algún accidente y presentan estress post traumático, etc. Esta vez, el caso se trataba más que de un niño, de una familia que sufrió hace unas semanas un accidente de auto. En éste murió la madre de la familia que iba conduciendo, el padre está hospitalizado, ingresó grave, ahora fuera de peligro, pero estará varios meses más en el hospital. Una de las hijas, de no más de 12 años, está hospitalizada porque recibió un fuerte golpe en la cabeza y al parecer hay daño neurológico. Otro de los hermanos fue dado de alta ayer, pero no puede caminar bien y fue llevado a casa de una abuela, diciéndole que ambos padres están hospitalizados y la abuela se encargará de cuidarlo por ahora. La otra es una sobrina que vivía con ellos hace un año y que tuvo que ser operada de la pelvis ya que se la fracturó con el impacto. Ella tampoco sabe que su tía murió.

La madre de la niña nos decía que ayer, le dijo que talvez si ella iba a ver a su tía a sala , se mejoraría más rápido. Yo sentí que la tía nos miraba preguntando si debía decirle a los niños que su madre había muerto y cómo decírselo, casi pidiendo que otros cumplieran esta labor por ellos. Entonces, uno se cuestiona que tan bueno ha sido mantener a estos niños con la idea de que su madre y tía sigue viva en alguna sala del hospital, grave, pero viva. Además, en este tiempo de trabajo con niños algo he aprendido y no me cabe duda de que los niños en el fondo saben que su madre ya no está y siguen el juego de los adultos en esta ilusión de hacernos creer entre todos que ese miembro de la familia sigue aún vivo en algún lugar y que dentro de poco lo verán. ¿Para quién, entonces, es más necesario creer que sigue viva, para los niños o para los adultos?

Nos vemos

Leonor

DESAHOGO

Hay veces que confiamos en las personas equivocadas y entramos en relaciones en las cuales sabemos vamos destinados al fracaso, pero a pesar de eso, hacemos el intento pensando en que algo puede cambiar en el camino y ahí ya partimos mal. Cuando las cosas finalmente terminan, la psicología que haz estudiadote sirve para ver las responsabilidades compartidas en que las cosas no funcionaran, pero a la hora de elegir parece que la psicología te abandona y toda la teoría en cuanto a la elección de pareja, se te borra de la mente o se esconde estacionariamente y reaparece, la muy traidora cuando ya estás en pleno sufrimiento.

Esta pudo ser una gran semana, pero tuvo un mal cierre.

Un abrazo

Cuidense y suerte con el amor.

Leonor

Dr. Blanco y sus opiniones.

Hace unos post atrás, el querido Dr. Blanco, amado por madres coquetonas, opinó a propósito de los mamoncitos, se habrá sentido tocado digo yo. Pero me interesa ver qué opinan de su comentario. Lo publico acá porque el desfasado en tiempo y espacio, opinó semanas después de publicado el post y hasta en otro que no era precisamente sobre el cual quería opinar , típico de él.

Aquí les va:

"Todos los hombres somos mamones unos mas mamones y otros menos... pero tambien es cierto que todas las mujeres son brujas ... unas mas brujas y otras menos brujas... ergo.... madre bruja.,.. hijo mamon... :)

Atte. Dr. Blanco "

Cáchenlo a él.

Nos vemos

Leonor